Autor desconocido
Quisiera, Virgen María,
Madre mía muy amada,
Tener el alma abrasada
En vuestro amor noche y día.
¡Oh, dulce Virgen María,
Madre de mi corazón!
¿Quién tuviera tanto amor
Que sobrepujara en ardor
A los serafines todos,
Amándoos por cuantos modos
Inventó el más fino amor?
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