martes, 17 de abril de 2018

Callada estas



Callada estas


Rafael Ángel Marañón


Callada estas ahora o así nos lo parece. 
Y también percibimos como que estás ausente, 
Pero somos nosotros que no hacemos presente 
Tu presencia grandiosa que la vida enriquece. 

Mi espíritu se llena de espanto y sobresalto, 
Si no te siento, madre, arrullando a mi lado, 
Pero sé que yo soy para ti muy amado, 
Y me sigues alzando al escalón mas alto. 

Con todo, virgen santa, llenas el alma mía 
De mórbida esperanza, de un divinal anhelo; 
Con un sutil empuje acercas a mí el Cielo 
Y libras a mi alma de su melancolía. 

Desoigo tus llamadas y alego neciamente 
De que tú no me escuchas cuando clamo en mi noche 
Y mi voz no te alcanza; solo tengo un reproche 
Que mana incomprensible de mi alma y de mi mente. 

Con tu ausencia dialogo y añoro tu presencia 
Y salgo en un instante de duda o de estupor 
Cuando escucho callado, sin prisas ni pavor, 
Y me entrego a la fe y alivio mi conciencia. 

Después de todo, madre, tú nunca me has dejado 
Y estabas junto a mí en gozo y en dolor 
Y has estado aguardando con infinito amor 
Para darme consuelo y librar de pecado. 

Gracias, María, te rindo por tu amable paciencia 
Que espera sin descanso al pobre pecador, 
Haciendo de un perdido un santo triunfador 
Que en la sangre de Cristo limpiara su conciencia. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...